​​

Filatelia mexicana

El deleite por la filatelia en México y en el mundo sigue tan vigente como el siglo pasado, a pesar de que los timbres postales y las cartas han dejado de circular considerablemente por la llegada del Internet, explicó el Dr. Raymundo Cea Olivares, investigador de la Facultad de Química de la UNAM y gran conocedor de la cultura filatélica. 

Durante la ponencia “La filatelia mexicana del Siglo XIX, aspectos históricos” organizada por el Instituto de Ingeniería y el Club Alexander von Humboldt México, señaló incluso que la obtención de sellos postales de otros países con gran valor se facilitó gracias a un sitio web destinado a la subasta y comercio electrónico llamado eBay.

El Dr. Cea Olivares mencionó que los timbres postales no se han dejado de producir debido a que siguen siendo parte de un amplio mercado y que recientemente salieron timbres con temática de la COVID-19 como homenaje a las personas que fueron reconocidas “Héroes de la pandemia”: médicos, enfermeros, recolectores de basura, policías, paramédicos, entre muchos otros oficios. 

El también exdirector del Instituto de Química compartió que su afición inició durante su niñez, cuando su madre le compró sus primeros timbres postales y formalizó este gusto cuando adquirió unas estampillas junto con la mujer que actualmente es su esposa. Desde ese momento conservó el placer por coleccionar la historia a través de lo que pareciera un simple papel. 

Coleccionar y clasificar estampillas, sobres postales y cartas antiguas vinculados a la historia de los países y de la humanidad es un pasatiempo de perseverancia, pues los precios de los sellos y disponibilidad varían de acuerdo a su estado de conservación, calidad de impresión, permanencia en el tiempo, lugar de procedencia, entre otros tantos factores que determinan su valor. 

También su costo depende de la demanda, la rareza y la historia que hay detrás de cada pieza, así como de la consignación y el matasellos. Hay algunas que superan los 10 millones o 20 millones de dólares, ya que hay casos tan raros y exclusivos como unas cartas escritas en tiempos de la ocupación Nazi, de la Segunda Guerra Mundial o de la Revolución Mexciana, que fue un gran episodio para la colección filatélica. 

Los timbres han sido importantes recursos económicos y artísticos por la calidad del diseño y de impresión, por lo que el Dr. Cea considera que en los sellos postales se conservan trozos de historia, y detalló que México es uno de los países más complejos para el coleccionismo postal porque hubo muchas emisiones distintas por estado. 

La colección filatélica se puede comenzar por temáticas, distritos o personajes, como el rostro de Maximiliano, Josefa Ortíz de Dominguez o de Benito Juárez, o por diseños de una cosa en específico como los zeppelin o los globos aerostáticos, incluso se puede iniciar por los timbres modernos, indicó el investigador universitario.  

Sin embargo, el experto advirtió que por el alto valor que tienen algunos de estos elementos hay personas que se dedican a falsificar y que hay que saber dónde y con quién comprar o intercambiar los sellos para no resultar estafado durante alguna transacción.