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El suministro de agua en la Ciudad de México se realiza a partir de bombeos que distribuyen el líquido a los cinco megasectores en que se divide la metrópoli. El Dr. Óscar Arturo Fuentes Mariles, investigador del Instituto de Ingeniería, describió el funcionamiento del sistema, además de exponer una propuesta para el mejoramiento del mismo, el 9 de agosto en el Salón de Seminarios Emilio Rosenblueth.

El doctor Fuentes Mariles es experto en temas de hidráulica de ríos, hidráulica marítima e hidrología de superficie, agua potable y alcantarillado. Cuenta con numerosas publicaciones académicas y artículos científicos, además de un gran número de tesis dirigidas en el posgrado de ingeniería civil.

Para esta presentación, el catedrático de la UNAM describió la organización del sistema de distribución de agua en la capital: “La estructura principal para la consiste en una red de tuberías, que por los diámetros que maneja, se le llama “red primaria”, a la que se conectan tuberías de menor diámetro para que llegue a los hogares”, comentó.

“Una parte del agua que distribuye la red primaria de agua potable proviene del sistema Cutzamala y Lerma, en la zona poniente. Debido a la ubicación de los 5 megasectores (que antes se dividían en 7 macrosectores), es difícil llevarla a la zona oriente Iztapalapa-Iztacalco-Tláhuac, ya que recibe menos cantidad de bombeo”, agregó.

​​ En la charla, el doctor resaltó que del sistema a la toma domiciliaria “se pierde mucha agua” y aunque, además de la red primaria existe un acuaférico y varios pozos a las orillas de la capital, hay demoras en las transferencias de caudal entre los megasectores. Debido a ello, revisó y recopiló información, documentos y planos de redes de distribución de agua. El análisis sirvió para estimar la oferta y la demanda por delegación.

 

Propuesta para mejorar la distribución de agua

Con el objetivo de sugerir acciones para mejorar la distribución de agua potable en la ciudad (incrementar el abastecimiento de la zona oriente) y ampliar la versatilidad de maniobras de operación ordinaria, así como las de mantenimiento y emergencia, el Dr. Fuentes, dio a conocer distintas propuestas de mejora para la ampliación del acuaférico capitalino.

El acuaférico es una red de tuberías al sur poniente que cuenta con 31 km longitud. Su diámetro empieza en 4 m. y termina en 3.1 m. en los últimos 11 km. Está conectado con el acueducto principal que corre al norte de la ciudad, en el Estado de México. Su capacidad de conducción es de 19 m³/s en los primeros 19 km y de 10.9 m³/s en los 12 km restantes. Se ocupa apenas el 20 por ciento de su capacidad.

Una elevación de la plantilla del acuaférico a 200m arriba de la red primaria permite que el agua llegue sin necesidad de bombeos, trabajos en los que se llega a desperdiciar el 44 por ciento del agua antes de llegar a la toma domiciliaria, según los datos del investigador.

La continuación del sistema aprovecharía el agua con mayor efectividad. Llegaría a los tres principales tanques existentes del megasector V: Cerro de la Estrella, Xaltepec y Caldera. Se considera la descarga a un nuevo tanque de almacenamiento localizado en las faldas del volcán Teuhtli.

De las 13 opciones originales de continuación de la construcción del acuaférico propuestas a finales de los años 90, sólo tres son posibles debido al desarrollo urbano y a consideraciones de tipo hidráulico.

La primera alternativa, consiste en que se termine en un túnel, con el problema de que hay que bajar y después subir el líquido, para lo que se requiere bombeo, por lo tanto, energía. Como segunda opción, se propone darle la vuelta a la zona, aunque se necesitaría de más infraestructura.

La tercera alternativa es una combinación entre las dos anteriores, en la que también se pueden aprovechar los 22.2 km del acueducto existente entre Xochimilco y Tulyehualco. Esta es la más viable, según los resultados del análisis, para el aprovechamiento del acueducto existente se puede hacer un recubrimiento de su interior o continuarlo con estructuras elevadas.

Como conclusiones, el Dr. Fuentes Mariles resaltó que los megasectores deben operar de forma independiente entre sí (con algunas líneas de conexión para emergencias). “Con ello se contribuiría a una reducción de fugas importante y a la mejora de la distribución del agua”, señaló el investigador.

El acuaférico tiene ubicación ventajosa por las elevaciones topográficas de su recorrido. Podría abastecer por gravedad gran parte de la CDMX, por lo tanto, se disminuirían considerablemente los bombeos. “Al tener menos bombeos se reducen las fugas y simplifica las maniobras de operación para conducir el agua, sobre todo las que están encaminadas a que llegue el líquido a la zona oriente de la ciudad”, agregó.